Biomasa y biocombustibles
Últimamente leo muchas noticias sobre los biocombustibles: bioetanol, biodiesel, biogas...
Supongo que están en pleno desarrollo en cuanto a desarrollo tecnológico, implantación industrial y creación de redes de distribución. Pero me sorprende ver que no se habla más de la combustión directa de la biomasa, que en mi opinión, tiene un gran interés a nivel doméstico e industrial.
La ventaja de los biocombustibles es que pueden seguir utilizándose los equipos actuales de generación de energía térmica, tal y como están o con pequeñas modificaciones.
El uso directo de la biomasa implica la sustitución de los equipos instalados, con el trastorno que implica para los usuarios y distribuidores.
Además, no creo que los automóviles puedan impulsarse por biomasa, así que los biocombustibles siguen siendo interesantes para muchas aplicaciones.
Sin embargo, la biomasa puede quemarse casi en su estado natural, o sometiéndola a sencillos tratamientos. Para obtener biocombustibles es necesario tratar la biomasa con procesos más o menos complejos, con el inconveniente secundario de los residuos que pueda generar.
Con esta anotación y la siguiente cierro mi racha pro-biomasa.